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Análisis de It Takes Two, un juego cooperativo lleno de emociones

“Se necesitan dos personas para destruir un matrimonio” reza la popular frase de Margaret Trudeau. ¡Y sólo un matrimonio para destruirlo todo!

Hazelight Studios, estudio responsable de A Way Out, apuesta a un clásico y lo reinventa con It Takes Two (en español, “Se Necesitan Dos”). Publicado bajo el ala de EA Originals, este plataformero de acción-aventura nos zambulle de cabeza en un océano de diversión, emotividad y originalidad y realmente le hace honor a su título: sólo se necesitan dos segundos para enamorarse por completo de sus tan adorables personajes.

Análisis de It Takes Two
Análisis de It Takes Two

It Takes Two ¿Cómo empieza esta aventura?

En las afueras de la ciudad viven May y Cody, quienes están a punto de divorciarse. Después de una charla difícil con su pequeña hija Rose, la niña corre a esconderse bajo una mesa con sus juguetes que tienen un parecido sorprendente con sus padres y, entre lágrimas, desea que sean amigos de nuevo. Sus lágrimas caen sobre los muñecos y algo mágico sucede: ¡May y Cody ahora son juguetes! En una mágica y extraña suerte de terapia de parejas contra su voluntad, deberán resolver sus diferencias y trabajar juntos para abrirse paso en el irónicamente inmenso mundo de lo pequeño y recuperar sus cuerpos.

May es ingeniera y el sostén económico de la familia, mientras que Cody se dedica a la jardinería y a las tareas del hogar. A lo largo de la historia, el estilo de juego de May estará más orientado a la acción mientras que el de Cody tendrá un enfoque en el apoyo. Los puzzles están orientados al trabajo en equipo y a la colaboración y son de lo más original, con mecánicas ingeniosas y bien pensadas que si bien no presentan mucha dificultad para el asiduo jugador de plataformas, aportan al juego ese tinte casual que hace que lo pueda jugar cualquiera.
A lo largo del camino podremos encontrar y desbloquear diversos minijuegos y competir entre nosotros con ningún otro beneficio más que la superioridad moral y absoluta que nos brinda, por ejemplo, ganarle un duelo de bolas de nieve a quien nos acompañe. También podremos interactuar con diferentes aparatos y objetos con fines lúdicos, como una mamushka que nos encierra o una catapulta en la que podremos hacer las veces de proyectil y surcar los cielos.

Modo multijugador

It Takes Two está pensado exclusivamente para dos jugadores, tanto cooperativo como online y al igual que su predecesor cuenta con el sistema de pase de amigo, lo que nos permite obtener el juego y entregárselo a un amigo para poder jugar juntos. Como en todo juego de este estilo, nuestros personajes tendrán objetos que les otorgarán habilidades para atravesar los diferentes obstáculos, pero con una vuelta de tuerca interesante: al final del capítulo, se pierden. En el siguiente, obtendremos nuevos artilugios y por ende un enfoque totalmente distinto, generando así que nunca se pierda la frescura y cada nivel se sienta único.

Análisis de It Takes Two
Análisis de It Takes Two

Apartado estético

El diseño de los personajes hace que nos sintamos dentro de una película animada: May es una muñequita de madera con anteojos de alambre y rizos de lana, mientras que Cody es un muñeco de arcilla, con un peinado que no se decide entre ser pelo o planta. Ambos lucen sacos tejidos de lana con un botón en el pecho y pantalones de remiendos, con costuras visibles por todas partes. Además, los elementos cotidianos que nos encontramos en nuestro camino también cobran vida; los fusibles se escapan corriendo con patitas diminutas, los soldaditos de juguete corretean de un lado a otro en un ajetreado castillo, los muñecos de nieve patinan sobre el hielo y las ardillas constituyen un grupo comando. Si, las ardillas siempre tuvieron vida, pero ¡son tan talentosas que hasta se infiltran en las reseñas!

Análisis de It Takes Two
Análisis de It Takes Two

Apartado audiovisual

Con una escala precisa, los escenarios están detallados rigurosamente y generan sobre nosotros una sensación de pequeñez. Desde jardines infestados de maleza hasta cobertizos de herramientas, nuestro siguiente terreno de juego será impredecible la mayor parte del tiempo, y todos estarán formados por aquellos objetos que no supondrían un obstáculo físico en tamaño real, como cubos didácticos, castillos de cartón, aspiradoras, peluches o relojes, entre otros.

Si bien el juego no cuenta con doblaje español, tanto el menú como todos los subtítulos se encuentran traducidos perfectamente. Gracias a un guion cómico como maduro y al impecable trabajo de los actores de voz, cuya energía y dinámica resultan armónicas se logra transmitir, entre risas, gritos y las típicas discusiones matrimoniales la emotividad de una historia que sabe ser tanto descabellada como realista. Al equipo de sonido no se le escapa absolutamente ninguna y, aparte de contar con una música de fondo minimalista en la exploración y electrizante en el combate, detalla por completo cada interacción que genere sonido: desde el crujir de los engranajes en movimiento, la vibración de las pisadas sobre el metal o la tensión de una cuerda al balancearse, hasta el apagado de la voz cuando atravesamos un tubo.

Conclusiones de It Takes Two

El aspecto más importante de este juego es su originalidad, por lo que cualquier comentario acerca de literalmente cualquier aspecto sería (y es) en detrimento de una experiencia que promete y cumple con creces.

¿Cómo definir It Takes Two en una frase? ¿Qué tal una paradoja? Espérense lo inesperado.