Una de las trilogías más importantes de toda la historia de los videojuegos llega remasterizada para que vuelvas a recorrer cada rincón de la Ciudadela. Si esta es tu primera vez a bordo de la nave Normandía, estás de suerte, estás por experimentar y viajar por un universo lleno de aventuras y emociones, como pocos juegos han logrado hasta el día de hoy, bienvenidos a Mass Effect.
El primer vuelo de Normandia
Allá por el 2007, el Mass Effect original vería la luz de la mano de BioWare, la empresa canadiense que ostentaba en aquel entonces de un increíble prestigio en la industria por haber revolucionado el mundo de los RPG con juegos como Baldur’s Gate, Neverwinter Nights y claro, Star Wars: Knights of the Old Republic, el queridísimo KotOR que haría de primeros pasos para esta compañía en el universo espacial en 2003 y la inspiró para más adelante traer una IP propia, que al día de hoy mueve masas increíbles de gente y que por seguro, sumará adeptos con su remasterización.
Más que una remasterización
BioWare sin duda le puso un cariño inmenso a este remaster y no se quedó solamente en mejorar el juego gráficamente para hoy disfrutarlo en resolución 4K, con nuevos efectos, iluminación y modelos mejorados que claro, todo esto también está. Sino que también se preocupó de realizar mejoras jugables, sobre todo en el primer título de esta trilogía que es probablemente el que más necesitaba de cambios visuales de gameplay para adaptarse a los días de hoy.
Desde el primer momento apreciamos que podemos jugar con la “FemShep” la versión femenina de nuestro protagonista que se había incluido en Mass Effect 3 y ahora podemos seleccionarla desde el inicio de la aventura. Además tenemos un nuevo sistema de leveleo opcional el cual nos permite subir nuestros personajes de nivel 1 a 30 en lugar de 1 a 60, todo esto ganando la misma cantidad de experiencia para llegar a los niveles máximos, el objetivo es que cada nivel que se sube tenga un mayor peso y podamos evolucionar de manera más sentida a Sheppard y sus compañeros.
Ya en el juego vemos cambios en el HUD, la forma de ver la vida de nuestros personajes se muda a la parte central inferior de la pantalla y cambia su estilo para ser mucho más visible y sencillo saber el estado del escudo y vida a la vez de cuantos medilife tenemos para administrar de mejor manera la cura.
El apuntado del juego ha sido mejorado, con cambios desde la mira hasta la sensación de disparo y con el agregado en Mass Effect 1, de que todos los personajes pueden utilizar todos los tipos de armas.
Los tiempos de carga claramente han sido mejorados y las pantallas o escenas de ascensor pueden ser salteadas para pasar directamente a la siguiente sección del mapa en cuestión, aunque es cierto que en estos sitios suelen darse buenas y muy recordables charlas entre los personajes que llevemos en nuestro pelotón en ese momento, es un detalle a agradecer poder evitarlas si así lo deseamos.
Lamentablemente por el lado de lo malo, si bien hay mejoras en el manejo del Mako sigue siendo bastante deficiente, ya no nos prendemos fuego instantáneamente en la lava pero el control sigue siendo muy duro y nos dará más de un dolor de cabeza estar en el vehículo en ciertas zonas por mas que vayan pasando las horas de juego en él.
Vale aclarar que si bien esta edición de Mass Effect Legendary Edition viene con los tres juegos y todos sus DLC, no tendremos toda la parte multiplayer que venía con el tercer título de la saga y aunque no sentimos que le hubiese agregado mucho a esta entrega particularmente, es algo a señalar.
¿Qué es Mass Effect?
Puede que como muchos lleguen a este análisis no conociendo esta trilogía por lo que quizá resulte necesario comentar la dimensión de la importancia que tuvo el juego en su primer lanzamiento, con relación a los posteriores títulos que fueron publicados en los años por seguir o al menos en la gran mayoría de las franquicias que tuvieron un éxito significativo.
Mass Effect es considerado por gran parte de la crítica como uno de los pilares de referencia en cuanto a los RPGs modernos, ya sea por la importancia del lore interno en la construcción del mundo, el peso de las elecciones que el jugador debe realizar mientras avanza por el título (con las emociones que esto llega a despertar), o por la enorme cantidad de integrantes del reparto que llegan a hacerse un lugar en el corazón de cada jugador que se adentra en su historia.
Además de lo anterior, como si fuera poco, también es imposible no señalar el tiempo que lleva de vida la trilogía original y el tiempo que la separa de este relanzamiento: pasaron casi diez años y más de una generación de consolas desde que se lanzó Mass Effect 3 para la Xbox 360 y la PlayStation 3 en 2012. Y con todo ese tiempo a cuestas, los tres títulos contenidos en esta Legendary Edition jamás dejaron de causar las mismas impresiones en los jugadores; nunca se sintió que la calidad fuera diluida por el tiempo, más allá de las obvias dificultades tecnológicas que saltan a la vista en cualquier título de la antigüedad de Mass Effect, si se lo compara con uno actual.
Es debido a estos factores que, cuando fue anunciado el lanzamiento de Mass Effect Legendary Edition, todos los fans sintieron una ansiedad enorme por haber visto llegar la oportunidad de volver a visitar su franquicia favorita, esperando que su nueva llegada tenga una remasterización que le hiciera justicia y que les permitiera revivir aquella aventura que marcó sus vidas, pero con las ventajas que otorgan los avances que se lograron en la industria de los videojuegos a lo largo de la última década.
Mass Effect: El nacimiento de un ícono
El primer título vio la luz en hace más de quince años y si hablamos de un juego de las características de Mass Effect, las mecánicas de disparo y combate de la época, no son precisamente lo que se recuerda como lo mejor de su tiempo. Se puede notar como el equipo desarrollador tuvo que lidiar con la difícil tarea de implementar las características actuales al primer título, pero sin sobrepasar demasiados límites, para no ahogar aquello que hizo único al juego cuando nació; si se cometía el error de “traer demasiado al futuro” al juego o “dejarlo demasiado en el pasado”, podría resultar en que los jugadores novatos en la saga lo sientan demasiado raro o que los veteranos terminen molestándose… por sentirse dejados de lado (o incluso traicionados). El resultado terminó siendo algo que podría sentirse como un gameplay un tanto tosco, pero que continúa manteniendo un encanto muy particular.
Aunque ya no existe la limitación en cuanto al uso de armas que era impuesta por la elección de la clase (por lo que Sheppard puede usar cualquier tipo de arma del arsenal y utilizarla), además de la evidente mejora en cuanto a las mecánicas de disparo, el jugador puede sentir que es bastante débil y que puede es derribado fácilmente. Siendo objetivos, podría tomarse como algo positivo, ya que equilibra la capacidad de uso de armas con la vulnerabilidad frente a los ataques enemigos, presentando una conjunción entre la jugabilidad de los juegos más modernos de la saga sin dejar de representar el desafío que podría esperarse de experimentar un juego de hace una década y media.
En cuanto a texturas e iluminación (lo primero que se nota al comparar este título con el original), es evidente que en su desarrollo tuvieron que traer aquellas visuales de 2007 a nuestro 2021, haciendo que se note el trabajo de acercar el arte del Mass Effect 1 a los tiempos de la “nueva generación”, logrando que valga la pena pasar un buen tiempo probando el Modo Foto.
Lo que sí quedó bastante claro es que el vehículo todo terreno, el Mako, está hecho para que los jugadores actuales no lo tomen como un tanque invencible del que jamás quieran bajarse, ya que sigue siendo igual de complicado de manejar, resultando este el aspecto donde más se nota la edad de este primer Mass Effect. Como aspecto positivo, podemos aclarar que, al menos ahora, los jugadores pueden odiar la forma en que se comporta mientras los lleva hacia donde quieren ir en realidad, ya que el vehículo no rebota a lo loco como en la entrega original.
Mass Effect 2: De ícono a leyenda
Pasando rápidamente del primer al segundo Mass Effect, es posible que no se noten muchas diferencias inmediatamente a nivel gráfico, cosa que va cambiando cuanto más tiempo se pasa en esta secuela. Reconocido por muchos como el mejor de los tres juegos, ahora esto se acompaña por unas mejoras sustanciales en cuanto al modelado de los personajes, ya que en las cinemáticas se puede apreciar como los rostros y expresiones tienen mucha más vida, dejando de lado las apariencias parecidas a simples muñecos.
Aunque hace una década podía notarse el cambio gráfico con respecto a su precuela, con esta remasterización se agrega aún más, ya que los colores están acentuados, los mapas cuentan con muchos más detalles manteniendo todo el conjunto a la altura de las mejoras de los modelos de los personajes, creando una sensación de que todo está “a nivel”.
El combate también recibió mejoras, con más capacidades a la hora de utilizar las coberturas y hacer carreras, además de que es posible recargar las armas en lugar de tener que soportar que con el uso estas se sobrecalienten. Todo esto crea una sensación de suavidad en el gameplay que realmente se aprecia y que se suma a que la cantidad de líneas de diálogo de los compañeros de escuadrón también aumentaron, creando situaciones que se pueden convertir en anécdotas de batalla con mucha facilidad.
Como un todo, incluyendo el hecho de que las decisiones que se deben tomar, tienen más consecuencias si no se les dedica una buena planificación, por lo que puede decirse sin tener temor a estar exagerando, que Mass Effect 2 hace todo lo que hizo su precuela, hace más y también lo hace mejor.
Mass Effect 3: Un cierre monumental
Lo que tal vez se nota más en el último capítulo de la Legendary Edition es la ausencia del multijugador del Mass Effect 3 original. Esto, además de eliminar el cooperativo, también sustrae el efecto que tenían las partidas multijugador en la campaña principal. Esto no es excesivamente importante para los jugadores que jueguen los dos juegos anteriores, ya que su progreso en esas entregas afecta al de Mass Effect 3; pero puede pasar que si alguien elige jugar directamente esta última entrega, va a necesitar jugar una mayor cantidad de contenido para alcanzar ciertos niveles de progreso.
La jugabilidad hace sentir su mejora respecto a los anteriores juegos, con un combate mucho más pulido y en el que resalta en la calidad del manejo de las coberturas que se puede disfrutar ahora, haciendo posible realizar tiros de precisión desde una posición protegida con mucha más eficiencia, lo que da una sensación de recompensa enorme. Además, el paso de las cinemáticas a la acción y viceversa no tienen un corte, haciendo mucho más fluido todo el proceso de vivir la historia.
Para cuando los jugadores comienzan a jugar a Mass Effect 3, se empieza a notar como la continuidad de la trilogía hace que se sienta como una sola entrega, con decenas de horas de una sola historia principal que atraviesa los tres títulos. Y hablando de la narrativa, Mass Effect Legendary Edition incluye la Versión Extendida del final de la historia, que añade escenas adicionales que expanden el fin de la trama que cuenta la historia de Shepard.
Conclusión de Mass Effect Legendary Edition
Esta entrega remasterizada que reúne las tres entregas de la trilogía original en un solo paquete logra reunir los ingredientes necesarios para llegar a cada uno de los jugadores, sin importar que jamás hayan experimentado la saga o que sean fans veteranos. Mass Effect Legendary Edition hace que el primer título pueda ser jugable en la actualidad, mientras que las ventajas de las cargas ultrarápidas hacen que el viaje a lo largo de los tres capítulos sea totalmente cómodo, dejando mucho más tiempo para apreciar las mejoras visuales que se entregan en esta ocasión y que pueden lograr que su sencillo Modo Foto pueda ser un lugar donde se llegue a invertir bastante tiempo.
Definitivamente, es muy recomendable que todos aquellos jugadores que disfruten de los RPGs y que pueden permitirse adquirir un juego del precio al que se ofrece Mass Effect Legendary Edition, se decanten por elegir esta entrega remasterizada de una de las sagas más icónicas de los juegos de rol modernos, ya que es muy difícil que se arrepientan (por no decir imposible).
Requisitos mínimos y recomendados para jugar Mass Effect Legendary Edition en PC
Te nombramos todos los requisitos mínimos y recomendados para poder jugar Mass Effect Legendary Edition en PC, sin ningún inconveniente.
- MÍNIMO:
- Requiere un procesador y un sistema operativo de 64 bits
- SO: 64-bit Windows 10
- Procesador: Intel Core i5 3570 o AMD FX-8350
- Memoria: 8 GB de RAM
- Gráficos: GPU: NVIDIA GTX 760, AMD Radeon 7970 / R9280X GPU RAM: 2 GB Memoria de Video
- DirectX: Versión 11
- Almacenamiento: 120 GB de espacio disponible
- RECOMENDADO:
- Requiere un procesador y un sistema operativo de 64 bits
- SO: 64-bit Windows 10
- Procesador: Intel Core i7-7700 or AMD Ryzen 7 3700X
- Memoria: 16 GB de RAM
- Gráficos: GPU: NVIDIA GTX 1070 / RTX 200, Radeon Vega 56, GPU RAM: 4 GB Memoria de Video
- DirectX: Versión 11
- Almacenamiento: 120 GB de espacio disponible
